.FROM MY LONDON TRIP.

Sienten todos como yo siento?

Viven todos como yo vivo?

Quisiera saber si sienten la sal en la lágrima,

en la herida,

tan tuya, 
tan mía.

Quisiera saber si viven el dolor, en lo hondo, infinito,

tan tuyo, solo mío…


Reconocen sus sentidos la armonía de la risa,

aprisionan sus labios la pasión del beso,

avivan sus ojos el color del verde, del agua, de la piedra,

lo sienten, dime?

Pues yo lo siento.

Pero aquello que más socava, lo que mina, 

destruye y permanece,

aquello encerrado en la saciada memoria,

es la causa. 

Mi fallo,tu error.

Es el acuerdo imposible, 

el inolvidable ardor,

que cual llama vive y yace,

ahora en este corazón,

para no dejarlo nunca,

pues ya no eres tú, ni soy yo.

En la historia, 

grabada en días, palabras y momentos,

no te sienten como yo te siento,  

ni te viven como yo te vivo…

Cómo decirlo...

Dos fotografías perdidas y media sonrisa para la hora del café.

Tú esperas mientras yo olvido, pensando que tal vez sea demasiado tarde para volver. No quiero hablar de culpables, de caras extrañas o filosofías. Quiero hablar de nuestra historia, con el pronombre nosotros; y que nada nos arranque de ahí, ni un trágico vendaval ni las lágrimas que compramos.

¿Acaso no es posible? Permanecer quietos, muy juntos, fundidos los dos, callados, con miedo de romper eso tan bonito que es el silencio de nuestros ojos.

Sí, tal vez pida demasiado. Pero no quiero aceptar que Abril y la manta sobre la hierba ya no volverán, ni siquiera las películas robadas por la puerta de atrás y los regalos que con tus labios dabas a mi boca.

Tal vez sí que quiero demasiado, porque todo lo que pido eres tú. A Ti. Contigo. Pero no sin ti.